Rodillo de espuma para recuperación

Entrenamiento

Última actualización: 25 de agosto de 2020

Algunas de mis actividades favoritas para combatir las agujetas son nadar, sentarme en una sauna de infrarrojos y usar el rodillo de espuma. Pero solo hay una de ellas puedo hacer en casa en tan solo unos minutos y de forma económica.

Aunque nadie sabe exactamente por qué funciona tan bien el rodillo de espuma, básicamente es una herramienta para masajear el tejido blando de forma manual. Cuando haces actividades nuevas o de gran intesidad que puedan causar dolor muscular, el rodillo ayuda a aliviar las molestias. Además de reducir el dolor, también permite mantener la amplitud de movimiento, por lo que evitarás moverte de forma diferente a causa de las molestias o la tensión muscular.

Usar un rodillo de espuma tiene sus ventajas, tanto si lo usas antes como después de entrenar, a primera hora de la mañana o antes de acostarte. Como habrás notado, lo importante no es cuándo lo usas, sino que lo uses y cómo lo uses. A muchas personas les va bien usarlo a primera hora de la mañana para seguir con su día a día, mientras que otros prefieren utilizarlo a la hora de entrenar porque así ya están centrados en su cuerpo.

Lo ideal sería usar el rodillo unos diez minutos al día. Algunos lo utilizan tan solo unos segundos en las zonas donde sienten molestias, pero así no conseguirán grandes resultados. En vez de eso, dedica diez minutos a centrarte en los grupos musculares con más restricciones.

Más abajo encontrarás algunos ejemplos de las zonas donde la gente experimenta una mayor tensión muscular o restricción de movimiento:

1. Columna torácica (parte media de la espalda).

2. Glúteos.

3. Cuádriceps.

4. Gemelos.

Busca el mejor momento del día para usar el rodillo de espuma durante diez minutos. Si dejas de usarlo en uno o dos días, busca otra hora. Dedicar unos minutos al día te ayudará a sentirte mejor y a mantener la amplitud de movimiento.