Guía para el ajuste del calzado de running: en qué debes fijarte cuando vayas de compras

El calzado de running está disponible en cientos de estilos y colores, y se confeccionan con diversos materiales. Pero cuando se trata de encontrar el calzado de running adecuado para ti, solo tienes que centrarte en una cosa: el ajuste.

En una evaluación de julio de 2018, efectuada en el Journal of Foot and Ankle Research, se descubrió que hasta el 72% de las personas no utilizan calzado con el ajuste correcto, lo cual causa dolores y trastornos en los pies. Así que si el calzado te queda bien, úsalo, pero si no te queda bien, pruébate otro par. Y si quieres obtener el ajuste perfecto, sigue estos consejos.

¿Cuándo fue la última vez que mediste el ancho y el largo de tus pies, y comparaste los resultados con una tabla de tallas de calzado? Es una buena idea verificar cuidadosamente tu talla real, especialmente si compras en línea.

Para medir el largo de tus pies, colócate con todo tu peso sobre un pedazo de papel y traza la forma de tu pie con un lápiz. Usa una cinta métrica para medir el largo, desde el centro de la parte posterior del pie hasta la punta del dedo más largo. Usa la siguiente tabla para determinar tu talla.

También debes prestar atención al ancho de tu pie, lo que influirá en la comodidad del calzado de runnning que elijas. Dibuja tu pie y mide la parte más ancha. Compara tus resultados con la siguiente tabla.

Algunas marcas pueden tener tablas de tallas diferentes de la norma, así que asegúrate de revisar su sitio web cuando compres en línea. Si uno de tus pies es más largo o ancho que el otro, elige la talla que se adapte a tu pie más grande. Y si tienes dudas sobre cuál es la talla adecuada para ti, pide media talla más grande.

Si vas a la tienda a probarte calzado de running, asegúrate de llevar los mismos calcetines de running absorbentes de sudor que usarás para entrenar, ya que los calcetines que lleves influirán en el ajuste del calzado.

También es recomendable comprar por la tarde, ya que tus pies se hincharán a medida que avance el día. Ve a la tienda después de tu jornada laboral (cuando tus pies probablemente estén más hinchados) para probarte varios pares diferentes.

Pero no te fíes de la sensación inicial del calzado, llévatelo siempre para hacer una carrera de prueba en una cinta de correr o en la acera fuera de la tienda. Si sales a correr con el calzado, te darás cuenta mejor de si el ajuste es cómodo o no.

No esperes que tu calzado de running se afloje, se estire o se vuelva más cómodo. Debes elegir un par que tenga un buen ajuste desde el momento en que te lo pongas.

En la mayoría de los casos, podrás darte cuenta enseguida si un calzado es adecuado para ti. Pero si tienes problemas para decidirte entre dos pares, pon atención a cómo interactúa cada parte de la anatomía del calzado con tu pie.

1. Busca una parte superior que tenga la misma forma que tu pie y asegúrate de que no lo roce ni lo jale. La parte superior Nike Flyknit está diseñada para proporcionar un soporte ligero sin dejar de ser suave y cómoda.
2. Para asegurarte de que el calzado tenga un buen ajuste en la puntera, intenta flexionar los dedos y separarlos dentro del calzado. Asegúrate de que tienes un espacio de aproximadamente un centímetro entre el dedo más largo del pie y el extremo del calzado.
3. Busca una montura que mantenga el pie en su sitio sin que te apriete demasiado el arco del pie ni te tire de él al pisar.
4. Presta atención al peso y a la firmeza de la entresuela. Lo ideal es que tengas la cantidad justa de amortiguación y que sea un calzado que no se sienta demasiado pesado cuando corras.
5. Fíjate en la forma de la suela para asegurarte de que se ajuste lo máximo posible a tu pisada. La suela debe ser lo suficientemente duradera como para proporcionar tracción y protección en la superficie que elijas para correr, pero lo suficientemente flexible como para permitir libertad de movimiento.
6. El drop del talón, o la distancia en altura entre el talón y el antepié del calzado de running, afectará tu pisada. Elige un calzado que no ponga una carga excesiva en ninguna parte del pie.
7. Asegúrate de que la plantilla se sienta bien la primera vez que te pones el calzado, pero no te fíes de la primera pisada para saber si el ajuste es el correcto para ti: haz siempre una carrera de prueba.
8. Un calzado con el ajuste erróneo puede causar ampollas en el cuello del tobillo. Un buen calzado de running no debería resbalarse al pisar ni rozar el tendón de Aquiles.

Alternar entre diferentes pares de calzado de running puede disminuir el riesgo de sufrir lesiones en un 39%, según un estudio de febrero de 2015 publicado en el Scandinavian Journal of Medicine and Science in Sports.

Los investigadores sospechan que esto se relaciona con la manera en que los diferentes modelos de calzado varían según se distribuya la fuerza del impacto en tus pies. Dado que el running implica un movimiento repetitivo, es bueno cambiar el calzado para modificar las partes del pie que soportan la mayor parte del impacto.

Solo tienes que asegurarte de que los dos pares de calzado de running tengan el ajuste perfecto para tus pies.