Conoce a Leticia

Leticia vive en São Paulo, la ciudad más poblada de Brasil y el centro neurálgico del fútbol callejero. "Empecé a jugar a los seis años", explica. "Al principio era la única chica. Solían decirme que este no era un deporte para mujeres, pero no les hice caso porque era lo que más me gustaba, así que seguí jugando".

Para ella, el fútbol es competir por su barrio en una pista de cemento local o divertirse en un partido improvisado en la calle. "Cogemos las chanclas, damos cuatro pasos y marcamos las porterías", comenta Leticia. "Si la calle está en pendiente, entonces el equipo que juega en la parte de arriba tiene que ir a por el balón si se lanza demasiado lejos. Y, cuando viene un coche, esperamos hasta poder continuar".

"La precisión es imprescindible durante todo el partido".

Leticia A.
São Paulo

La agilidad y la precisión son vitales en los espacios estrechos y las distintas superficies de São Paulo. Leticia confía en toques precisos y movimientos rápidos para ganar. "Cuando juego en la calle, me gusta mantener el balón cerca del pie. Si eres preciso todo acaba saliendo bien. Y si un partido está muy igualado, con ambos equipos atacando y defendiendo, la agilidad puede marcar la diferencia", nos dice.

Los jugadores de fútbol callejero como Leticia, que adoran este deporte por la libertad que les ofrece, han servido de inspiración para las Phantom Vision 2 IC. "Me siento muy agradecida por el fútbol", afirma. "Si tengo algún problema, jugar me ayuda a olvidarme de él. El hecho de estar aquí y hacer lo que me gusta... para mí, jugar al fútbol lo es todo".