Todo lo que debes saber del salto triple en atletismo

Según World Athletics, el organismo rector internacional del atletismo, el salto triple se ha incluido en todos los Juegos Olímpicos desde la inauguración de los juegos modernos de 1896. La versión actual, que consiste en realizar un rebote, un paso y un salto, no se estandarizó hasta 1908. Anteriormente, el evento consistía en hacer dos rebotes y un salto.

El salto triple se agregó a la categoría femenina en los Juegos Olímpicos de 1996.

Los atletas de salto triple empiezan cada intento corriendo por la pista para aumentar la velocidad y el impulso. La longitud mínima de la pista es de 40 metros, según el reglamento de atletismo de EE. UU.

Al final de la pista hay una tabla de batida: una pieza rectangular y blanca de madera u otro material rígido hundida en la pista. La tabla de batida mide entre 18 y 22 centímetros. Al llegar a la tabla de batida, el atleta debe propulsarse con uno de los pies hacia la arena. Si el pie con el que salta sobrepasa la tabla, el salto se considerará nulo.

En el salto triple, el despegue inicial empieza con un pie, que impulsa al atleta para hacer el primero de los tres saltos: el rebote.

Para el rebote, los atletas saltan hacia delante con un pie. Según Jacobson, para los diferentes atletas de saltos, este aspecto puede ser su fortaleza o debilidad, y realmente todo depende de las preferencias del atleta.

En su opinión, lo difícil no es saltar, sino aterrizar. Eso se debe a que en el salto triple, el aterrizaje del salto de rebote debe realizarse con el mismo pie que el atleta utilizó para despegar. Si el atleta despega en el salto de rebote con el pie izquierdo, tendrá que aterrizar con ese mismo pie para iniciar el segundo salto, que se conoce como paso.

Al finalizar el rebote, el atleta aterriza sobre el mismo pie que utilizó para despegar al principio (por ejemplo, el pie izquierdo). Para hacer un paso, tiene que volver a saltar hacia delante con la misma pierna.

Según Ferguson, la clave para superar el desafío deportivo que supone pasar del rebote al paso consiste en poder absorber la fuerza del primer salto y, luego, pasar al segundo.

Al finalizar el paso, el atleta debe aterrizar con el pie opuesto (en nuestro ejemplo, sería el derecho). Después, el atleta se impulsará con el pie derecho para hacer el salto final.

Para el salto, el atleta debe llegar lo más lejos posible con el pie hasta la arena. La distancia que recorra desde la tabla de batida hasta el final del salto será la distancia total del intento.

Según World Athletics, los atletas suelen tener unos seis intentos. Sin embargo, puede que algunos atletas con marcas más cortas sean eliminados después de tres saltos. El atleta de salto que haya conseguido el intento con más longitud será el ganador. En caso de empate, se utilizará como criterio de desempate el segundo salto con más longitud realizado por uno de los atletas.

En los Juegos Olímpicos de 2020, las marcas ganadoras fueron de 15.67 metros en la categoría femenina y de 17.98 metros en la masculina.

El récord mundial en la categoría masculina se estableció en 1995, y es de 18.29 metros. El recórd mundial en la categoría femenina, se estableció en 2022, con 15.74 metros.

Los atletas de salto triple, así como los de salto de altura y de longitud, necesitan un equipo mínimo para competir: calzado de salto y ropa deportiva de primera calidad.

El calzado de atletismo Nike incorpora clavos metálicos que se agarran a la superficie de la pista. Está confeccionado con una placa bastante rígida en la parte inferior que crea una base estable para que los atletas de salto despeguen, a la vez que cuenta con una amortiguación en la entresuela que absorbe el impacto de los aterrizajes.

Redacción: Greg Presto